Jan Potocki pulió el asa de una tetera de plata y formó con ella una bala. La hizo bendecir por un cura -"por si acaso existiese Dios"- y se voló los sesos.
Hay quien sugiere que el autor del Manuscrito encontrado en Zaragoza temía y sospechaba sufrir de licantropía. Nunca lo sabremos. Potocki era un erudito conde polaco que vivió la época de la revolución francesa -lo llamaban "citoyen comte"- y que viajó incesantemente por Europa y Asia, hasta el límite de China, adonde no pudo ingresar porque el emperador le negó el permiso. Pero lo que encuentro más fascinante de Potocki es su profunda comprensión del corazón del hombre (lo que para muchos, imagino y concedo, no quiere decir nada).
"Veréis por doquier más mal que bien, pero en ningún lado veréis el mal sin mezcla de un poco de bien, y esto debe bastarle al sabio para consolarlo de la vida".
Jan Potocki (1761-1815)
9 comentarios:
Me intriga quiénes más componen la lista. Yo tengo una, después comparamos notas.
Carlo Michelstaedter, el de dos posts más abajo, es sin dudas otro de ellos.
y dónde huir si ya no quedan islas para naufragar
Es que si no fuera por la licantropía no se explica el laburo que se tomó para fabricar la bala.
Será que para sabio me restan varias cuadras que patear, pero no alcanzo a ver ese poco de bien mezclado en - digamos - Baby Etchecopar.
Seguiremos investigando.
Tal vez se suicidó por su incomprensión del corazón de la mujer...
Mire que hacerme buscar palabras en el diccionario!
Imagínome que el tipo se pegó el tiro en la boca, así de paso hacía desaparecer el bigotín y esa nariz!
Y otra cosa...porqué se habrá preocupado de hacer vendecir la bala...si dios esxistiese supuestamente no perdonaría el suicidio...o esa es la iglesia?
saluttis tacts
Carissimo: No se preocupe, si nosotros somo capaces de naufragar en cualquier lado.
Jack: Supongo que ese es el fundamento de la versión de la licantropía. Pero por ahí simplemente le encantaba esa tetera y la quería llevar en la sesera. En cuanto a lo otro, es interesante la asociación del mal con la estupidez. Bioy Casares decía que el mal era una de las formas de la estupidez. Yo siempre me sorprendo diciéndome que lo que más hay es estupidez... Pero ahora no sé que decir.
Trompo: si es por eso nos tenemos que matar todos.
Marina: le respondo con un aforismo de Novalis: "Para un espíritu verdaderamente religioso nada es pecado"
Yo la frase la tenía como de Borges, pero Borges y Bioy se intercambiaban vaias frases. Si no me equivoco la asociación del mal con la estupidez proviene de esa oposición de Borges al federalismo y al Martin Fierro, que asociaba la maldad a la ilustración de los doctores porteños ("...es mejor que el aprender mucho...").
Me parece que el problema de la inteligecia y la estupidez es que son cuestiones de valor. Creo. No sé.
tacts, salió bendecir con V corta...no da, no da.
Yo no creo en el pecado, de hecho me gusta "pecar"
besos amigo
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