martes, mayo 22, 2007

Nosotros mayestático, vosotros vafangulo

En las reuniones sociales nunca falta un imprudente que, una vez informado de nuestras actividades mediante preguntas rayanas a la indiscreción, se dedica a tomarnos examen sobre nuestra capacidad, nuestros conocimientos y nuestra formación. Lo hacen de tal modo que parece que lo que en realidad buscan no es otra cosa que confirmar y hasta demostrarnos lo que ya saben, es decir, que ellos son sin dudas más listos que nosotros y que harían nuestro trabajo mucho mejor. Todo esto hemos aprendido a sufrirlo con paciencia. Pero que ese mismo imprudente nos asalte con insistentes preguntas directas sobre nuestro patrimonio e ingresos es algo que nos hace hervir la sangre. Si hablar de dinero es de mal gusto, mucho más lo es en la mesa y con un desconocido. Se ve que su mujer tampoco juzgaba innoble o indigno el tópico porque se ocupó de informarnos a todos que cada vez que va al supermercado no gasta menos de ochocientos pesos.

13 comentarios:

Paula dijo...

"Cómo que tenés que estudiar? Cuántos años te faltan? Si hoy por hoy hay títulos en venta por todos lados! Te conviene comprar uno."

Sic.

El Trompo Promiscuo dijo...

Miserables mediocres mentecatos!!!!

La condesa sangrienta dijo...

¿Letras? ¿y eso para que sirve?

Anónimo dijo...

Sencillamente me agradan tus posteos.

Enzo

Roedor dijo...

O sea, se ha topado con un sujeto doblemente impertinente, según se lee... Va a tener que revisar su asistencia a determinados compromisos sociales, me parece.

Yo soy uno de los sufridos karmáticos que por alguna razón desconocida (para nosotros) expía parte de sus culpas yendo al supermercado semanalmente. Sé lo que se gasta. Si esa suma es mensual y la familia es numerosa, es relativamente razonable, pero honestamente no viene al caso; si yo me viera en la circunstancia de comentarle a alguien eso como tema de conversación, al regresar a mi casa agarro la .38 y procedo contra mí mismo.

Ruth dijo...

"¿Sociología? Ah, es como Psicología, ¿no?... Acá lo que se necesitan son ingenieros y policías".
Lo juro, dijo eso.

Roedor dijo...

Naaa...

Ese personaje desubicado no vivía acá, ¿verdad? Porque ingenieros y policías sobran... En realidad, los policías no caen bien en ningún lado.

Almirante Margarito dijo...

Ah, qué alivio sentirme comprendido y acompañado. Gracias a todos.

Enzo muchas gracias, es ud. muy generoso.

Satamarina dijo...

tremendo. Odio los que hablan de $.
Cuanto ganás?
Cuanto pagás de alquiler ? es una de las preguntas que más me enervan...

Y que me pregunten sobre mis quehaceres alguien que no conozco no me importa tanto, pero que me lo pregunte alguien a quien no veo hace mucho, alguien de la primaria por ejemplo puede ser muy frustrante.

salutti tacts

Jack Celliers dijo...

La respuesta correcta ante la indagación de sus actividades laborales sería: "lidero una banda de secuestros express", dicho con una sonrisa simpática.

Almirante Margarito dijo...

Marina: ese es un pescador de frustraciones.

Jack: Me gusta. La voy a adoptar si ud. me permite.

Anónimo dijo...

Que haces?Trabajo y en mis ratos libres me toco.
Cuando me hablan de dinero,simplemente respondo que hace dos años deje de tocar dinero,ya que tiene bacterias.y que luego me talibanize mas en el tema y directamente no puedo hablar de ese tema.
Todo esto dicho con cara de Kevlar(material flexible pero indestructible)
Cariños
A

InFerNet dijo...

El tipo que se regodea al hablar de dinero. En público. Con su señora al lado igual de miserable. Con la ceguera suficiente para no darse cuenta de que a uno no le interesa. Ajustando el dial de los pecados, no sé en qué estación se escucha mejor: si en la soberbia, la avaricia o la lujuria. Sin mencionar que en el fondo de sus ojitos brilla una envidia de ser otro cualquiera, y no éste que es, vulgar, desgraciado, poca cosa.